Yuppie Psycho es un videojuego independiente desarrollado por Baroque Decay que, de forma consciente o no por parte de los creadores, ha salido en el momento correcto. Por desgracia, últimamente los noticiarios se han llenado de la palabra crunch, con la que hemos descubierto los oscuros entresijos de esta industria protagonizados por la explotación laboral y los ambientes hostiles. Esta aventura se mueve precisamente por estos peligrosos lugares, presentándonos el primer día de trabajo de Brian Pasternack en la empresa Sintracorp. Y como ya le pasó a Leon Kennedy, no pudo tener un primer día más movidito.
A nuestro protagonista le han asignado una misión muy clara: debe acabar con la bruja que vaga por la empresa. Para ello deberá recorrer diez pisos llenos de amenazas y oscuridad. Tras el prólogo, el juego nos permite movernos a lo largo y alto de todo el edificio, no obstante, no podremos acceder a todos los lugares así como así, necesitaremos de ciertas herramientas que obtendremos por el camino. El ejemplo más claro es el uso necesario de una linterna, ya que la mayoría de las zonas carecen de buena iluminación. A su vez, haremos uso de otros objetos que nos ayudarán a resolver puzles de dificultad moderada, vencer a determinados enemigos o superar ciertos obstáculos. A todo ello le sumamos la necesidad de administrarnos alimentos y bebidas para poder curarnos. En definitiva, es un survival horror en toda regla.
Una vez hecha la presentación, hablemos de lo realmente interesante de esta aventura. La atmósfera es, sin duda, uno de sus puntos fuertes. Nuestro protagonista explora una gran cantidad de zonas de lo más variopintas y lúgubres, oficinas llenas de sangre y empleados corrompidos, bosques, almacenes… Cada piso está dotado de una temática y unos objetivos, pero es mejor que lo descubráis por vosotros mismos. Esto ayuda a mantener al jugador en tensión y entretenido la mayor parte del tiempo, ya sea porque huyes de un enemigo mortal o porque te paras a hablar con uno de sus excéntricos personajes.
Y justa esta es otra de las facetas principales del título, lo exagerado de muchas situaciones, las conversaciones absurdas o la inocencia de Brian nos sacarán alguna que otra carcajada mientras recorremos Sintracorp. Antes he dicho que Yuppie Psycho pone de relevancia la explotación laboral y los ambientes hostiles de trabajo que merman al personal, aunque no creo que pretenda en ningún momento hacer una crítica social fundamentada. Dicho punto siempre se trata con humor y exagerándolo lo máximo posible. Esto último es lo que da pie a crear enemigos grotescos, de cierto carácter simbólico, que buscan aterrar al jugador y matarlo.
Hablando de la muerte, esta no es algo que te puedas tomar a broma en Yuppie Psycho ya que el título no posee autoguardado y la única manera de salvar tu partida es imprimiendo tu preciosa cara de becario con una impresora, para lo cual necesitas un cartucho de tinta para encender dicho aparato y de un papel especial (recurso de mucha importancia). Esto afecta principalmente en dos aspectos a la experiencia jugable. Por un lado, te obliga a administrar bien tus recursos para lograr sobrevivir. Sin embargo, también puede llegar a frustrar bastante el hecho de perder tanto tiempo de partida por morir en un mal momento. Y dado que la aventura tiene muchas zonas con rompecabezas mortales y jefes que obligan al ensayo y error para poder superarlos, hace ver que quizá esta parte del diseño podría haber sido algo más permisiva con el jugador.
Las mecánicas son sencillas y no inventan nada nuevo. Contamos con un inventario donde almacenar y gestionar nuestros objetos, y podemos correr e interactuar con lo que nos rodea pulsando una tecla, desde hablar con un PNJ hasta investigar cada archivador que te encuentres. La exploración de escenarios es fundamental a lo largo de nuestra aventura. Nuestra misión es sobrevivir con estas limitadas herramientas mientras buscamos a la bruja, pero, claro, no esperaba más de un pobre chico de pueblo que viene a su primer día de trabajo en la gran ciudad.
Al igual que la ambientación está muy lograda, también lo hace su guion. La narración nos empuja a seguir a través de intriga, suspense y situaciones de lo más raras. Quizá no os vuele la cabeza, pero tampoco lo pretende. Su misión es mantenernos entretenidos, inmersos en sus escenarios y proporcionarnos todo tipo de metáforas que somos libres de interpretar. ¿Qué misterios guardarán los fundadores de la empresa? ¿Quién es la bruja, por qué hace esto, dónde está…?
En conclusión, Yuppie Psycho es un videojuego entretenido, bien escrito, de escenarios y, sobre todo, situaciones memorables que te mantendrán pegado a la pantalla durante alrededor de sus diez horas de campaña. A pesar de algunos momentos de frustración, es una aventura muy disfrutable que te azota continuamente con metáforas, a las que seguro les dais una interesante interpretación cada uno de vosotros. No dudéis en pasaros por Sintracorp para hacer una visita a sus inolvidables y mortales instalaciones.